Abstract Objective: In certain situations parenteral nutrition subsidiary patients may have an increase in zinc demand (Zn). The objective of the study was to know the scope of the use of Zn sulfate in patients with parenteral nutrition in Spanish hospitals. Method: A survey was designed focusing on the incorporation of Zn sulfate into parenteral nutrition, under real practice conditions, in the adult and pediatric population. We asked about the number of parenteral nutrition supplemented with zinc in the last year, by the doses used, and the situations in which it was added to parenteral nutrition formula. The survey was conducted by telephone interview to the pharmacists responsible for the parenteral nutrition units. Results: A total of 53.9% (n = 69) of the contacted hospitals responded to the survey. 60.9% incorporated Zn sulfate into the parenteral nutrition of adults, and 76.2% used it in pediatric patients. In adults, 31.1% used Zn to complete the dose provided by the solution of trace elements, 46.7% supplemented Zn in patients with high intestinal losses, and 28.6% did it in critically ill patients with a high degree of metabolic stress. The majority supplementation regimen was 10 mg/day (55.6%). In the pediatric population Zn ampules were used mainly in preterm infants, with the most used doses being 200 mcg/kg/day and 400 mcg/kg/day (42.6% and 23.4%, respectively). Conclusions: The use of zinc sulfate in adult parenteral nutrition to complete the dosages suggests that solutions of trace elements could be deficient in Zn. Its use as a supplement in adult parenteral nutrition is not an extended practice in specialized nutritional support protocols in Spanish hospitals, highlighting its low employment in patients with significant catabolism.
Resumen Objetivo: En determinadas situaciones, los pacientes subsidiarios de nutrición parenteral pueden tener un incremento en la demanda de zinc (Zn). El objetivo del estudio fue conocer el alcance de la utilización del sulfato de Zn en pacientes con nutrición parenteral en los hospitales españoles. Método: Se diseñó una encuesta centrada en la incorporación del sulfato de Zn en nutrición parenteral, en condiciones de práctica reales, en la población adulta y pediátrica. Se preguntó por el número de nutrición parenteral suplementadas con zinc en el último año, por las dosis utilizadas, así como por las situaciones en las que se añadía a la fórmula de nutrición parenteral. La encuesta se realizó mediante entrevista telefónica a los facultativos responsables de las unidades de nutrición parenteral. Resultados: Respondieron a la encuesta el 53,9% (n = 69) de los hospitales contactados. El 60,9% incorporó sulfato de Zn en la nutrición parenteral de adultos, y el 76,2% lo empleó en pacientes pediátricos. En adultos, el 31,1% lo utilizó para completar la dosis aportada por la solución de oligoelementos, el 46,7% suplementó Zn en pacientes con pérdidas intestinales elevadas y el 28,6% en pacientes críticos con alto grado de estrés metabólico. La pauta de suplementación mayoritaria fue la de 10 mg/día (55,6%). En la población pediátrica, las ampollas de Zn se emplearon principalmente en los neonatos pretérmino, siendo las dosis más utilizadas las de 200 mcg/kg/día y 400 mcg/kg/día (42,6% y 23,4%, respectivamente). Conclusiones: El empleo de sulfato de zinc en la nutrición parenteral de adultos para completar las dosis sugiere que las soluciones de oligoelementos podrían ser deficitarias en Zn. Su uso como suplemento en la nutrición parenteral de adultos no constituye una práctica extendida en los protocolos de soporte nutricional especializado en los hospitales españoles, destacando su bajo empleo en pacientes con catabolismo importante.