Introduction It is widely accepted that psychiatric comorbidity can increase the severity, chronicity, and treatment resistance of psychiatric disorders. In various studies worldwide, it has been estimated that the prevalence of alcohol use disorders in women with disordered eating behaviors (DEB) is situated at between 2.9 and 48.6%. It is worth noting that previous studies have not considered the analysis of the variables that could explain the comorbidity between DEB and alcohol use in adolescents, such as impulsivity, which is the key variable for explaining this comorbidity. On the other hand, most studies have addressed the adult population in psychiatric hospitals or people with eating disorders (ED) or alcohol use disorders. It is considered that those subjects have already developed psychiatric comorbid disorders. Impulsivity could be an unspecific trait that aggravates the psychiatric condition of a determined person and it is therefore more likely for that person to seek specialized care. According to the above, the role of impulsivity in the comorbidity of ED and alcohol use might not be similar to that of the general population, mostly among those who have not yet developed a whole clinical syndrome. Therefore, we consider that it is important to clarify the involvement of impulsivity in the comorbidity between disordered eating behaviors (DEB) and binge drinking (BD) in high school students. It is also crucial to analyze the association between impulsivity and the coexistence of DEB and binge drinking (BD) in female students aged between 15 and 19 years at public high schools in the State of Mexico. Methods Data for this study were drawn from the Project entitled "Prevalence and Factors Associated with Disordered Eating Behaviors in Adolescent Women with Different Levels of Urbanization and Migration Intensity" (CONACyT-SEP-2004-46560). The design for this study is cross-sectional and analytical. A sample of 2357 female students at 11 public high schools in the State of Mexico was randomly selected during the 2006-2007 school year. For data collection for this project, a questionnaire was used that included socio-demographic variables, the Plutchik Impulsivity Scale (PIS), the Brief Questionnaire to Measure Risky Eating Behaviors (BQREB), and the questions on alcohol use included in the Questionnaire of Surveys on Substance Use in Students in Mexico (2003 version). Data were analyzed with the STATA version 10 survey function. Results Impulsivity was associated with the coexistence of DEB and BD (U=224427; p<0.01). The 3.5% of female students with impulsivity presented DEB and BD together vs. 0.6% who did not; 19.6% of female students with impulsivity presented one of the two behaviors vs. 7.8% without this trait. Impulsivity was associated positively and significantly with the coexistence of DEB and BD (t=3.8; p<0.01), regardless of socioeconomic variables, such as the father's educational attainment, the mother's educational attainment, and the number of services in the household. Conclusion The results of this paper indicate a statistically significant association between impulsivity and the coexistence of DEB and BD. This means that there is a greater percentage of coexistence of DEB and BD in female high school students considered to be impulsive in comparison with adolescents without this trait. This occurs regardless of socioeconomic variables, such as the father's educational attainment, the mother's educational attainment, and the number of services in the household. Future research should establish the role of other variables such as depression and examine the association of impulsivity with socioeconomic variables.
Introducción En términos generales, se acepta que la comorbilidad psiquiátrica puede incrementar la gravedad, la cronicidad y la resistencia al tratamiento de los trastornos psiquiátricos. En diversos estudios en todo el mundo se ha estimado que la prevalencia de trastornos por consumo de alcohol en mujeres con conductas alimentarias de riesgo (CAR) se sitúa entre el 2.9 y el 48.6%. Es importante señalar que los estudios anteriores no han considerado el análisis de las variables que podrían explicar la comorbilidad entre las CAR y el consumo de alcohol en los adolescentes, tales como la impulsividad, que es la variable considerada como la más importante para explicar dicha comorbilidad. Por otro lado, la mayor parte de la literatura ha estudiado a población adulta en hospitales psiquiátricos o a sujetos que ya han cumplido con los criterios diagnósticos de los trastornos de la conducta alimentaria (TCA) y de los trastornos por uso de alcohol. Se ha considerado que dichas poblaciones ya han desarrollado trastornos psiquiátricos comórbidos y que la impulsividad puede ser un rasgo inespecífico que agrava la situación psiquiátrica de una persona y que de esa forma sea más probable que acuda a una institución hospitalaria. Por lo tanto, es posible que la participación de la impulsividad en la comorbilidad entre los TCA y el consumo de alcohol no sea similar en la población general, sobre todo en la que no ha desarrollado los trastornos aún. Por lo tanto, consideramos importante aclarar la participación de la impulsividad en la comorbilidad entre las conductas alimentarias de riesgo (CAR) y el consumo excesivo de alcohol (CEA) en la población general y especialmente en aquellos sujetos en riesgo de presentar estos trastornos. Para ello se consideró importante analizar la asociación entre la impulsividad y la coexistencia de las conductas alimentarias de riesgo y el consumo excesivo de alcohol en estudiantes de sexo femenino de entre 15 y 19 años en escuelas públicas del Estado de México. Método Los datos para este estudio fueron obtenidos del Proyecto "Preva-lencia y Factores Asociados a Conductas Alimentarias de Riesgo en Mujeres Adolescentes en Localidades con diferente Nivel de Urbanización e Intensidad de Migración" (CONACyT-SEP-2004-46560). El diseño del estudio es transversal-analítico. La unidad de análisis fueron las estudiantes de sexo femenino entre 15 y 19 años de edad en instituciones educativas públicas de nivel medio superior en el Estado de México. Para la selección de las estudiantes, se utilizó un muestreo aleatorio estratificado. La muestra consistió en 2357 estudiantes de 11 escuelas públicas en el Estado de México durante el año escolar 2006-2007. Para la recolección de datos se empleó un cuestionario que incluía variables sociodemográficas, la Escala de Impulsividad Plutchik, el Cuestionario Breve de Conductas Alimentarias de Riesgo, y las preguntas sobre el consumo de alcohol, incluidas en el cuestionario de estudiantes (versión 2003) de las encuestas sobre consumo de sustancias en estudiantes de México. Los datos fueron analizados con la función survey del programa estadístico STATA versión 10 con una ponderación de la muestra que correspondió a la probabilidad de selección debido al nivel de marginación y estatus migratorio. Para determinar la asociación entre la impulsividad y la coexistencia entre las CAR y el CEA, se realizó un análisis de regresión ordinal. Resultados La impulsividad se asoció con la coexistencia entre las conductas alimentarias de riesgo y el consumo excesivo de alcohol (U=224427, p<0.01). El 3.5% de las estudiantes con impulsividad presentaron CAR y CEA de manera conjunta vs. el 0.6% que no cumplieron con dicha definición, mientras que el 19.6% de las estudiantes con impulsividad presentaron una de las dos conductas vs. 7.8% sin dicho rasgo. La impulsividad se asoció de manera positiva y significativa con la coexistencia CAR & CEA (t=3.83; p<0.01), de manera independiente a las variables socioeconómicas como la escolaridad del padre, la escolaridad de la madre y el número de servicios en la vivienda. Conclusión Los resultados de este trabajo indican una asociación estadísticamente significativa entre la impulsividad y la coexistencia de CAR y CEA. Lo anterior significa que hay un porcentaje mayor de la coexistencia de CAR y CEA en las estudiantes que cumplieron la definición operacional de impulsividad en comparación con las estudiantes sin dicho rasgo, de manera independiente a las variables socioeconómicas como la escolaridad del padre, la escolaridad de la madre y el número de servicios en la vivienda. Los resultados del presente estudio muestran que la impulsividad está asociada con una serie de conductas que pueden incrementar el desarrollo de un TCA comórbido con un trastorno por consumo de alcohol, y por lo tanto, sugieren un peor pronóstico para las adolescentes incluidas en el estudio. Lo anterior plantea la necesidad de detectar a los sujetos en riesgo de desarrollar ambos trastornos y su canalización a los servicios de salud especializados. Queda pendiente establecer el papel de otras variables como la depresión, y estudiar la asociación entre la impulsividad con las variables socioeconómicas mencionadas.