Se presenta una aproximación al discurso político-religioso de la jerarquía eclesiástica de la Diócesis del Zulia en relación con el golpe de Estado acaecido en Venezuela el 24 de noviembre de 1948, según las editoriales del diario “La Columna”. Se encuentra que la línea editorial de este diario a finales del trienio 1945-1948 demuestra una fuerte oposición de la jerarquía eclesiástica del Zulia al gobierno del trienio acciondemocratista, al cual trató de desprestigiar con la difusión de un discurso negativo acerca de la acción del gobierno en los ámbitos social, moral y educativo, fundamentado en una concepción del partido de gobierno como un brazo del comunismo internacional. Una vez consumado el derrocamiento del presidente Rómulo Gallegos, los editores del diario “La Columna” difunden un discurso legitimador del Golpe de Estado del 24 de Noviembre, asociando al derrocado gobierno con el caos, la inmoralidad, la corrupción y la incapacidad para gobernar, y a las Fuerzas Armadas con el retorno de la moral, con la paz, la seguridad y el bienestar de la familia venezolana.
This study presents an approach to the political-religious discourse of the ecclesiastical hierarchy at the Diocese of Zulia, Venezuela, in relation to the Venezuelan coup d’État of November 24th, 1948, according to editorials in the newspaper, « La Columna ». It was found that the editorial line of this newspaper at the end of the 1945-1948 period, demonstrates strong opposition by the ecclesiastical hierarchy in the State of Zulia to the three-year government of the Acción Democrática party, which tries to discredit it by disseminating negative discourse regarding government action in the social, moral and educational spheres, based on a concept of the governmental party as an arm of international communism. Once President Rómulo Gallegos had been overthrown, the editors of “La Columna” granted unconditional support to the military junta governing the country, spreading a legitimizing discourse for the Coup d’État, associating the overthrown government with chaos, immorality, corruption and the incapacity to govern, and the Armed Forces with the return of morality, peace, security and well-being for the Venezuelan family.