Abstract Introduction: A tumor in the adrenal gland from studies performed for an unrelated indication they are known as "incidentalomas". Are rare lesions that can be found in up to 4% of young people, but up to 10% of patients between the fi fth and seventh decade of life. The advent of modern diagnostic imaging methods such as computed tomography and magnetic resonance imaging have signifi cantly increased their diagnosis and becoming increasingly common face them. The spectrum on the type of injury is extensive. They can be: benign, malignant, or not functional injuries and their fi nding undertakes to perform a diagnostic protocol seeking to establish their nature and defi ne a treatment plan that can be surgical or not. Case report: We report the case of a 60 year old in our service attended by nonspecifi c pain in right hipocrondrio compatible with biliary colic, before the discovery in ultrasonography (completed with a suspected abdominal CT and liver tumor) of a dependent injury right adrenal gland. After the diagnosis and by the characteristics of the lesion protocol, resection of a cystic tumor complex of 15 × 13 × 10 cm depending on the right adrenal gland, histopathological analysis was performed which corresponded to adrenal Myelolipoma. The postoperative course of the patient was favorable, he graduated the third day and remained asymptomatic at the time of this report. Conclusion: Incidentalomas are injuries to surgeons facing today more frequently due to the availability of better diagnostic imaging resources. Before his discovery, we perform a complete evaluation protocol to establish the nature of the injury. Surgery is indicated in all cases where malignancy is suspected or those considered benign, symptoms occur, whether large tumors (>4 cm) or secretory, and when the tumor during follow present changes in their characteristics could be associated with greater complications as malignant or bleeding. If the conditions of the tumor and the surgeon's experience allow, the laparoscopic approach will be the first choice.
Resumen Introducción: A los tumores en la glándula suprarrenal mediante estudios realizados por una indicación no relacionada se les conoce como “incidentalomas”. Son lesiones raras que se puede encontrar en hasta un 4% de la población joven, pero hasta el 10% de los pacientes entre la quinta y la séptima década de la vida. El advenimiento de los modernos métodos diagnósticos de imagen como la tomografía computarizada y la resonancia magnética han incrementado considerablemente su diagnóstico y cada vez resulta más común enfrentarse a ellos. El espectro en el tipo de lesión es amplio. Pueden ser: lesiones benignas, malignas, funcionales o no, y su hallazgo obliga a realizar un protocolo de diagnóstico que busque establecer su naturaleza y definir un plan terapéutico, que puede ser quirúrgico o no. Reporte de caso: Presentamos el caso de una paciente de 60 años de edad atendida en nuestro servicio por dolor inespecífi co en hipocrondrio derecho compatible con cólico biliar, ante el hallazgo en ultrasonografía (que se completó con una tomografía abdominal y con sospecha de tumor hepático) de una lesión dependiente de glándula suprarrenal derecha. Tras realizar el protocolo diagnóstico y por las características de la lesión, se realizó resección de un tumor quístico complejo de 15 × 13 × 10 cm dependiente de la glándula suprarrenal derecha, cuyo análisis histopatológico correspondió a un mielolipoma suprarrenal. La evolución postoperatoria de la paciente fue favorable, egresó al tercer día y se mantenía asintomática al momento de este reporte. Conclusión: Los incidentalomas son lesiones a las que los cirujanos nos enfrentamos hoy con mayor frecuencia debido a la disponibilidad de mejores recursos diagnósticos de imagen. Ante su hallazgo, debemos realizar un protocolo completo de evaluación para establecer la naturaleza de la lesión. La cirugía estará indicada en todos los casos en que se sospeche malignidad o en aquellos que, considerados benignos, produzcan síntomas, sean tumores grandes (> 4 cm) o secretores, y cuando durante el seguimiento el tumor presente cambios en sus características que pudieran asociarse a complicaciones mayores como malignización o sangrado. Si las condiciones del tumor y la experiencia del cirujano lo permiten, el abordaje laparoscópico será la primera opción.