Justificación y objetivo: las esporas fúngicas aéreas son consideradas agentes etiológicos de la rinitis alérgica y el asma. El objetivo del presente estudio fue analizar la contaminación fúngica ambiental en tres centros de enseñanza primaria del cantón Central de la provincia de Heredia, midiendo la concentración de esporas fúngicas aéreas por metro cúbico. Métodos: se utilizó el equipo para muestreo volumétrico aéreo Burkard Personal Volumetric Air Sampler durante las épocas seca y lluviosa. Los conteos de esporas se relacionaron con los factores meteorológicos y las características estructurales de los centros educativos analizados. Resultados: se encontró un total de 1391,89 ± 119,70 esporas/m3 en marzo, 3194,45 ± 577,03 esporas/m3 en mayo, 3747,12 ± 568,05 esporas/m3 en octubre y 1009,99 ± 81,24 esporas/m3 en diciembre. En marzo, octubre y diciembre, aproximadamente el 91,0% de estas esporas pertenecían a cuatro grupos: Aspergillus/Penicillium, ascosporas, basidiosporas y Cladosporium. Sin embargo, en mayo el 78,46% de las esporas identificadas pertenecían al género Cladosporium. Al correlacionar la concentración de esporas fúngicas se encontró correlación negativa con la velocidad del viento (-0.418, p<0.05), correlación positiva con la precipitación pluvial (0,568, p<0,05), correlación positiva con el porcentaje de humedad relativa (0,504, p<0,05), y no se encontró correlación con los cambios de temperatura. Conclusión: la concentración de esporas fúngicas encontrada en las tres escuelas muestreadas es mayor al límite de 1000 esporas por metro cúbico, considerado saludable.
Background and aim: Fungal spores are considered etiological agents of allergic rhinitis and asthma; therefore, it is advised to monitor fungal levels within the classrooms. The aim of this paper was to study fungal aerial contamination in three public schools of Heredia by measuring the concentration of aerial fungal spores per cubic meter. Methods: We used the Burkard Personal Volumetric Air Sampler to collect and identify fungal spores during the dry and rainy season. The relationship between the fungal spore concentration, the meteorological factors and structural characteristics of the schools was determined. Results: A total of 1391.89 ± 119.70 spores/m3 was found in March, 3194.45 ± 577.03 spores/ m3 in May, 3747.12 ± 568.05 spores/m3 in October and 1009.99 ± 81.24 spores/m3 in December. Except for May, approximately 91.0 % of the spores identified belonged to four groups: Aspergillus/ Penicillium, ascospores, basidiospores and Cladosporium. In May, 78.46 % of the spores identified were Cladosporium. A negative correlation was found between spore concentration and wind velocity (-0.418; p<0.05), and a positive one with rain (0.568; p<0.05) and with humidity (0.504; p<0.05). No correlation was found with temperature changes. Conclusion: The three schools analysed presented fungal spore concentrations which exceeded the limit of 1000 spores per cubic meter which is considered as healthy.