Resumen Desarrollar herramientas basadas en criterios fundamentados para evaluar un proceso educativo de manera rigurosa y sistemática, y así tomar decisiones orientadas a su mejora, es un asunto de importancia en la agenda de investigación del campo educacional. Si bien son numerosos los trabajos en esa dirección, no se dispone, hasta ahora, de un modelo de evaluación aplicable a cursos masivos. En este artículo se presenta un modelo destinado a valorar la calidad de un proceso de estudio en el que participan numerosos docentes y estudiantes; la asignatura en la que tiene lugar es cuatrimestral, y forma parte del curso de ingreso a una universidad pública nacional. El modelo fue concebido como recurso para la reflexión profesional de quien tiene responsabilidades de coordinación de la asignatura; su diseño resultó compatible con los drásticos cambios que impuso la pandemia de SARS-CoV2. Lo integran dos cuestionarios de carácter censal, uno destinado a los profesores y el otro, a los estudiantes, basados en una adaptación de los criterios generales que conforman la noción de idoneidad didáctica, procedente del Enfoque Ontosemiótico. Los cuestionarios presentan una serie de ítems que operacionalizan el constructo idoneidad y permiten medirlo en una escala intervalar. Se espera que el modelo constituya un aporte para la valoración de la idoneidad de procesos de estudio similares, y, en particular, para la toma de decisiones por parte de quienes los coordinan.
Abstract Developing tools based on well-founded criteria to evaluate an educational process in a rigorous and systematic way, and thus making decisions aimed at its improvement, is an important issue on the educational field research agenda. Although there are numerous works in this direction, so far there is no evaluation model applicable to massive courses. This article presents a model designed to assess the quality of a study process in which many teachers and students participate; the course is four months long and is part of the freshman course to a national public university. The model was conceived as a resource for the professional reflection of those who have responsibilities for coordinating the subject, and due to its design, it was compatible with the drastic changes imposed by the SARS-CoV2 pandemic. It consists of two census questionnaires, one for teachers and another for students, based on an adaptation of the general criteria that make up the notion of didactic suitability, from the Onto-semiotic Approach. The questionnaires present a series of items that operationalize the suitability construct and allow it to be measured on an interval scale. The model is expected to contribute to assessing the suitability of similar study processes and, in particular, to decision-making by those who coordinate them.