Abstract Changes for fast-growing forest management have an immediate effect on carbon stocks and the regional carbon sequestration rate, by incorporating carbon dioxide into biomass plant, therefore it is essential to know their condition and response to management, for proper management. The aim of this research was to evaluate the effect of two silvicultural management methods after 21 years of reforestation, on the carbon stocks in the soil at 10 cm, 20 cm, and 30 cm deep: as well as mulch, dead wood, roots, and aerial biomass, in the Sierra Norte de Oaxaca. Sampling was carried out in two sites with management: (1) silvicultural development method (MDS) and (2) Mexican irregular forest method (MMOBI) (low intensity) and in three natural forests of pine, oak, and pine -oak. Aerial tree biomass, dead wood and roots were estimated by allometric equations and carbon was calculated. Mulch and soil were measured on an automatic analyzer. The MMOBI method presented a higher C content in soil and litter (127.89 Mg C ha-1), but the largest carbon reservoir was found in the tree biomass of the pine-oak forest (383.9 Mg C ha-1). The MMOBI can be a management alternative that favors carbon stocks in the soil, while the pine-oak forest demonstrates a potential as a tree carbon stocks at an age over 40 years old.
Resumen Los cambios por el manejo forestal, cuyo objetivo es el crecimiento rápido, tienen un efecto en los almacenes y en la tasa regional de secuestro de carbono al incorporar el bióxido de carbono en la biomasa de las plantas; por ello, es primordial conocer su condición y respuesta a diferentes estrategias de manejo para una adecuada gestión. El objetivo de esta investigación fue evaluar el efecto de dos manejos silvícolas, después de 21 años de reforestación, sobre los almacenes de carbono en el suelo a 10 cm, 20 cm y 30 cm de profundidad, así como en mantillo, madera muerta, raíces y biomasa aérea en la Sierra Norte de Oaxaca. Se realizó un muestreo en dos sitios manejados con: (1) método de desarrollo silvícola (MDS) (alta intensidad) y (2) método mexicano de ordenación de bosques irregulares (MMOBI) (baja intensidad) y en tres bosques no manejados de pino (BP), encino (BE) y pino-encino (BPE). La biomasa arbórea aérea, madera muerta y raíces fueron estimadas mediante ecuaciones alométricas, a partir de ello, se calculó el C. El carbono del mantillo y del suelo se determinaron en un analizador automático. El método MMOBI presentó un mayor contenido de carbono en el suelo y hojarasca (127.89 Mg C ha-1), pero el mayor reservorio de C se encontró en la biomasa arbórea del bosque de pino-encino (383.9 Mg C ha-1 ). El manejo MMOBI puede ser una alternativa de manejo que favorezca los almacenes de carbono en el suelo, mientras que el bosque de pino-encino demuestra un potencial como almacén de carbono arbóreo a una edad mayor de 40 años.