Abstract Introduction: the goal of this study was to evaluate whether an association exists between dietary components related to inflammation and oral squamous cell carcinoma (OSCC) in Argentina. Methods: a case-control study was carried out with 3 controls for each case and participants of both genders who were between 24 and 85 years of age, who were recruited at the outpatient clinic, Odontology School, Universidad Nacional de Córdoba, between 2012 and 2015. Dietary information was collected using a semi-quantitative food frequency questionnaire from which energy-adjusted Dietary Inflammatory Index (E-DII) scores were computed. Logistic regression models were fit to assess the association between E-DII and OSCC. Results: significantly higher intakes of macronutrients such as fat, protein and cholesterol, and of micronutrients such as iron, riboflavin, monounsaturated, polyunsaturated, omega-6 and omega-3 fatty acids, and vitamin B6 were observed in cases as compared to controls (all p < 0.05). We also observed a significant 69% increase in OSCC for each point on the E-DII scale (OR 1.69, 95% CI [1.18-2.43]) after adjusting for alcohol and tobacco consumption. Conclusion: we found an association between diet-associated inflammation, as represented by the E-DII, and risk of OSCC. Future research should be directed at deepening our understanding of this association in other populations, and should include studies utilizing prospective designs.
Resumen Introducción: el objetivo de este estudio fue evaluar la asociación entre los componentes de la dieta relacionados con la inflamación y el carcinoma oral de células escamosas (OSCC) en Argentina. Métodos: estudio de casos y controles con 3 controles para cada caso y participantes de ambos sexos, con edades comprendidas entre 24 y 85 años, que fueron atendidos por demanda espontánea en los Consultorios Externos de la Facultad de Odontología de la Universidad Nacional de Córdoba entre 2012 y 2015. La información sobre la dieta se recopiló mediante un cuestionario semicuantitativo de frecuencia alimentaria, a partir del cual se calcularon las puntuaciones del Índice Inflamatorio Dietético (E-DII), ajustado por energía. Se utilizó un modelo de regresión logística para evaluar la asociación entre el E-DII y el OSCC. Resultados: en los casos se observaron ingestas de macronutrientes como grasas, proteínas y colesterol, y de micronutrientes como hierro, riboflavina, ácidos grasos monoinsaturados, poliinsaturados, omega-6 y omega-3, y vitamina B6 significativamente más altas que en los controles (p < 0,05). También observamos un aumento significativo del 69% en el OSCC por cada punto en la escala E-DII (OR 1,69, IC 95% [1,18-2,43]) después de ajustar el consumo de alcohol y tabaco. Conclusión: nuestros resultados mostraron una asociación entre la inflamación asociada a la dieta, representada por el E-DII, y el riesgo de OSCC. La investigación futura deberá dirigirse a profundizar en la comprensión de esta asociación en otras poblaciones, incluyendo estudios que utilicen diseños prospectivos.