In Mexico, over 400 000 t of black beans are consumed every year, and the country's production is insufficient, which is why it is also imported. By planting varieties with a higher potential yield tan those used nowadays, greater amounts can be produced, and imports reduced or even avoided. The aim was to establish the yield and adaptability of lines and varieties of Mesoamerican breed of black beans, in different environments in Mexico (one in Chiapas, three in Veracruz, one in Puebla, one in the State of Mexico, two in Guanajuato, one in Tamaulipas, two in Durango, one in Zacatecas, one in Nayarit and two in Sinaloa) in 2008. The experiment was set up in a 4*4 lattice design with four repetitions, in fields of four five-meter long furrows, separated by 0.76 m. During the trials, diverse agricultural characteristics were determined, including yield. With the yield data, a combined analysis was performed (environments-genotypes) and the stability parameters were estimated using the main additives effect and multiplicative interaction model. Highly significant differences were found (p< 0.01) between environments, genotypes and the interaction of both factors. The environments explained variance (59%) further, in comparison to the environment*genotype (23%) interaction and genotype (7%). The highest yields were obtained in Mazatlán, Sinaloa and Durango, Durango, whereas the lowest was found in Guasave, Sinaloa. The Negro Papaloapan variety displayed the highest average yield of 1.4 t ha-1 and presented a reduced interaction with the test environments.
En México se consumen más de 400 000 t de frijol de grano negro y la producción nacional es insuficiente por lo que se recurre a la importación. Con la siembra de variedades de mayor rendimiento potencial que las de uso actual y amplia adaptación, es factible obtener una mayor producción y disminuir o evitar las importaciones. El objetivo fue determinar el rendimiento y adaptabilidad de líneas y variedades de frijol negro, raza mesoamericana, en diferentes ambientes de México (uno en Chiapas, tres en Veracruz, uno en Puebla, uno en el Estado de México, dos en Guanajuato, uno en Tamaulipas, dos en Durango, uno en Zacatecas, uno en Nayarit y dos en Sinaloa) en 2008. El experimento se estableció en diseño látice 4*4 con cuatro repeticiones, en parcelas de cuatro surcos de 5 m de longitud, separados 0.76 m. Durante la conducción de los ensayos se determinaron diversas características agronómicas, entre ellas el rendimiento. Con los datos de rendimiento se realizó análisis combinado (ambientes-genotipos) y se estimaron los parámetros de estabilidad, con el modelo de efectos principales aditivos e interacción multiplicativa. Se detectaron diferencias altamente significativas (p< 0.01) entre ambientes, genotipos y la interacción de ambos factores. Los ambientes explicaron en mayor proporción la varianza (59%), en comparación con la interacción ambiente*genotipo (23%) y genotipo (7%). Los mayores rendimientos se obtuvieron en Mazatlán, Sinaloa y Durango, Durango, mientras que el más bajo se obtuvo en Guasave, Sinaloa. La variedad Negro Papaloapan obtuvo el mayor rendimiento promedio de 1.4 t ha-1 y mostró reducida interacción con los ambientes de prueba.