Resumen En el ámbito minero, uno de los mayores desafíos enfrentados por el mundo actual, es la integración de la actividad económica con la preservación ambiental, las preocupaciones sociales y los sistemas eficientes de gobernanza. El logro de esta integración puede ser denominado "desarrollo sostenible"; y su perduración en el tiempo, "desarrollo sustentable". Hasta el momento no existe una definición ampliamente aceptada referida a la "pequeña minería"; sin embargo, se ha coincidido a nivel mundial la consideración de dichas actividades mineras con el nombre de "Minería Artesanal y en Pequeña Escala - MAPE". En Bolivia se tiene datos de una fuerza laboral en la MAPE de cerca de 72000 personas involucradas; de las cuales, 54% están involucrados en la explotación de minerales base y 45% en la explotación de oro, alcanzando un 27% de la proporción productiva minera. La producción minera de la MAPE Boliviana alcanza a: 12 toneladas de oro; 433 toneladas de plata; 149 toneladas de zinc y 12 toneladas de estaño (dato con referencia anterior a la inclusión de cerca de 5000 cooperativistas a empresa minera estañífera de Huanuni). Los numerosos impactos ambientales provocados por la MAPE en Bolivia son tal vez la mayor preocupación de muchos analistas del sector de la minería; los cuales se resumen en: Contaminación con mercurio y cianuro; eliminación directa de relaves y efluentes en los ríos; peligros debido a diques para relaves mal construidos; daño en los ríos en áreas aluviales; ríos convertidos en cienos; daño por erosión y deforestación; y finalmente, destrucción del paisaje. En general, la falta de éxito del gobierno boliviano para controlar ambientalmente las actividades de la MAPE se debe en parte a que los marcos reguladores tienden simplemente a controlar, sin ofrecer muchos beneficios obvios o incentivos para los mineros. Los mineros artesanales y en pequeña escala sólo formalizarán y registrarán las operaciones si ven que logran ciertas ventajas reales al hacerlo. Para incorporar a la MAPE a programas nacionales de protección ambiental, es necesaria la implementación de ALBAs (Estudios de Línea Base) conjuntos, como medida inicial; los mismos deberían ser definitivamente encarados bajo responsabilidad del estado; para luego, incorporar el principio de las "Tecnologías Limpias" en sus procesos, como segundo paso. Para ello, se requiere de un apoyo técnico y tecnológico adecuado a la MAPE, como tarea prioritaria del estado, que requiere además del apoyo al desarrollo de la investigación científica y tecnológica en dos líneas prioritarias de investigación: 1. Tecnologías limpias aplicables a la explotación y procesamiento de minerales base y otros en el sector de la minería artesanal y pequeña minería 2. Tecnologías limpias aplicables a la explotación y procesamiento de oro en el sector de la minería artesanal y pequeña minería
Abstract In the mining field, one of the greatest challenges faced by the world today is the integration of economic activity with environmental preservation, social concerns and efficient governance systems. The achievement of this integration can be called "sustainable development" and its durability over time. So far there is no widely accepted definition referring to "small mining"; however, the consideration of such mining activities under the name of "Artisanal and Small Scale Mining - MAPE" has coincided worldwide. In Bolivia, there is data on a labor force in the ASM of about 72,000 people involved; of which, 54% are involved in the exploitation of base minerals and 45% in the explo itation of gold, reaching 27% of the mining productive proportion. The mining productionof the BolivianMAPE reaches: 12 tons of gold; 433 tons of silver; 149 tons of zinc and 12 tons of tin (data with reference prior to the inclusion of about 5,000 cooperative members in Huanuni tin mining company). The numerous environmental impacts caused by the ASM in Bolivia are perhaps the main concern of many analysts in the mining sector; which are summarized in: Pollution with mercury and cyanide; direct elimination of tailings and effluents in rivers; dangers due to badly constructed tailings dams; damage to rivers in alluvial areas; rivers converted into silts; damage by erosion and deforestation; and finally, destruction of the landscape. In general, the lack of success of the Bolivian government to environmentally control the activities of the ASMM is partly due to the fact that the regulatory frameworks tend to simply control, without offering many obvious benefits or incentives for the miners. Artisanal and small-scale miners will only formalize and register operations if they see that they achieve certain real advantages in doing so. To incorporate the MAPE into national environmental protection programs, it is necessary to implement joint ALBAs (Baseline Studies), as an initial measure; they should be definitely addressed under the responsibility of the state; to then, incorporate the principle of "Clean Technologies" in their processes, as a second step. To do this, it requires technical and technological support appropriate to the ASM, as a priority task of the state, which also requires support for the development of scientific and technological research in two priority research areas: 1. Clean technologies applicable to the exploitation and processing of base minerals and others in the sector of artisanal mining and small-scale mining 2. Clean technologies applicable to the exploitation and processing of gold in the artisanal and small-scale mining sector