Objective: To investigate the association between eating-away-from-home (EAFH) and a) the quality of dietary carbohydrate intake and b) the quality of fat intake. Material and methods: We assessed 19,371 participants in the SUN cohort who completed a validated baseline food frequency questionnaire. Quality indices of carbohydrate (CQI) and fat (FQI) were used. Multiple regression models were fitted to determine the association between the frequency of EAFH (4 categories) and both indices. Logistic regression analysis was used to assess the association between the frequency of EAFH and low CQI or FQI (<25th percentile). Results: Participants showed an average CQI and FQI of 11,3 (SD 3,2) and 1,7 (SD 0,5), respectively. A higher frequency of EAFH (>2 times/week) was associated with a poorer CQI and a poorer FQI. For CQI, the adjusted mean difference was -0,29, 95%CI: -0,41, -0,17 (p for trend <0,001), and for FQI it was -0,02, 95%CI: -0,03, -0,001 (p for trend 0,03). Participants with a highest frequency (> 2 times/week) of EAFH had higher adjusted risk of a poorer CQI, (adjusted OR 1,31, 95%CI 1,17, 1,46, p for trend <0,001), but this habit (EAFH) was unrelated to FQI (adjusted OR 0,93, 95%CI: 0,83, 1,03, p for trend 0,194). Key findings: A higher frequency of EAFH was associated with a poorer quality of dietary fat, and particularly, dietary carbohohydrate. These findings highlight the importance of nutritional education addressed to consumers who frequently do out-of-home meals.
Objetivo: Investigar la asociación entre la frecuencia de comidas fuera de casa (CFC) con a) la calidad de hidratos de carbono y b) la calidad de grasas. Materiales y métodos: Se evaluaron 19.371 participantes de la cohorte SUN que completaron un cuestionario basal de frecuencia de consumo de alimentos previamente validado. Se utilizaron los índices de calidad de hidratos de carbono (ICHC) en una escala de 4 a 20 y de grasas (ICG) en una escala de 0,62 a 5,92. En ambos casos, a mayor puntuación mayor calidad. Se utilizó la regresión lineal múltiple para determinar la asociación entre la frecuencia de CFC (4 categorías) y la puntuación de ambos índices, y la regresión logística para medir la asociación entre la frecuencia de CFC y un bajo ICHC o ICG (<percentil 25). Resultados: Los participantes mostraron una media de ICHC e ICG de 11,3 (DE 3,2) y 1,7 (DE 0,5), respectivamente. Una mayor frecuencia de CFC (>2 veces / semana) se asoció con un menor ICHC (ß: -0,29, IC 95%: -0,41 a -0,17, p <0,001), y con un menor ICG (ß: -0,02, IC 95%: -0,03 a -0,001, p <0,03). Los participantes con CFC >2 veces/semana tuvieron mayor riesgo de peor ICHC (OR: 1,31, IC 95%: 1,17-1,46, p <0,001), pero no de peor ICG (OR: 0,93 IC 95%: 0,83-1,03, p 0,194). Conclusiones: Hacer con mayor frecuencia CFC se asoció con una peor calidad de grasas en la dieta y especialmente con peor calidad de hidratos de carbono. Estos resultados destacan la importancia de la educación nutricional dirigida a los consumidores de CFC.