In Uruguay, the introduction and use of transgenic seeds has become an intermittent process of agreements and disagreements between the players involved. Upon the introduction of the transgenic soybean (Glycine max) in 1996 an area of conflict began, with the scenarios changing in accordance with the degree of involvement of the different players. These include the producers' organizations with differing nuances on the subject, the companies of agricultural inputs which commercialize transgenic seeds, the community of researchers that hold the expert knowledge about the subject matter, the State and political policies that have changed with regard to the authorization, supervision and control of the GMOs, some environmentalist NGOs that have rejected the authorization of transgenic events, and the general consumers. The controversy has been subject to the unsteadiness of the prominent role that several players have assumed at different moments, failing to involve en masse the civilian society which has largely remained misinformed and alien to the debate. In this context, the different meanings, social representations and strategies around agrobiotechnologies are analyzed, sustained by supporters as well as by detractors of these technologies.
En Uruguay, la introducción y el uso de semillas transgénicas es un proceso intermitente de encuentros y desencuentros entre actores diversos. Desde la introducción de semilla de soja (Glycine max) transgénica en 1996, se ha ido configurando una arena de conflicto con escenarios cambiantes de acuerdo al grado de involucramiento de distintos actores. Entre ellos se cuentan las organizaciones de productores con distintos matices sobre el tema, las empresas de insumos agrícolas que comercializan las semillas transgénicas, la comunidad de investigadores que detenta el saber experto sobre la temática, el Estado y la política pública que ha sido cambiante en relación a la autorización, supervisión y control de OGM, algunas ONG ambientalistas que han mostrado su rechazo a la autorización de eventos transgénicos, y los consumidores en general. La polémica ha estado sujeta a los vaivenes de los protagonismos que los distintos actores han asumido en diferentes momentos sin lograr, por ello, involucrar masivamente a la sociedad civil, que ha permanecido, en gran parte, desinformada y ajena al debate. En este contexto se analizan los distintos significados, representaciones sociales y estrategias en torno a las agrobiotecnologías, sustentados tanto por partidarios como por detractores de estas tecnologías.