ABSTRACT In Navarre, the Smoking Cessation Program (PAF) was launched in 1994, result of the collaboration between Public Health and Primary Care. In 2001 it was integrated into the Tobacco Regional Action Plan, together with the other two lines of action: prevention of smoking initiation and promotion of smoke-free spaces. PAF includes two levels of intervention, a basic and an intensive one, with programmed educational support, individual and group. Medications for smoking cessation have been intermittently subsidized by the Health Department of Navarre. In December 2017, funding of medications for smoking cessation was reintroduced, in the same conditions of any other medication. Treatments are limited to one per patient and year, always including educational support. In 2018, 6139 people benefited from this funding, 50% women and 60% with yearly income lower than 18000 euros. We carried out a preliminary evaluation through a telephone survey. Overall, 35% of participants reported to keep abstinent after one year, 40% among those who also received intensive educational support. Conclusions: PAF in Navarre is an intervention model based on a large experience of collaboration between Primary Care and Public Health, which is necessary to promote. Funding medications for smoking cessation have proved to be effective within PAF program and it may contribute to equity as it facilitates the access to people with lower income. Success rates are greater receiving educational support. There are new challenges in the future related to all action lines of the Action Plan.
RESUMEN En Navarra el Programa de Ayuda a Dejar de Fumar (PAF) nace en 1994 fruto de la colaboración entre Salud Pública y Atención Primaria y desde 2001 se integra en el Plan Foral de Acción sobre el Tabaco, junto con otras dos líneas de actuación: prevención al inicio y espacios sin humo. El PAF incluye dos niveles de intervención, básico e intensivo, con apoyo educativo programado individual y grupal y periodos de financiación farmacológica. En diciembre de 2017 se reintrodujo la financiación de los fármacos para la deshabituación tabáquica en las mismas condiciones que el resto de medicamentos, limitada a un tratamiento por paciente y año, siempre en el contexto de un programa de apoyo educativo. En 2018 se beneficiaron de la financiación 6.139 personas, la mitad mujeres y 6 de cada 10 con rentas inferiores a 18.000 euros. Los resultados de la evaluación preliminar, realizada mediante encuesta telefónica, muestran una tasa declarada de abandono al año del 35%, que asciende al 40% si se recibe apoyo educativo. Conclusiones: El PAF en Navarra cuenta con un modelo de intervención y una amplia experiencia en la colaboración entre Atención Primaria y Salud Pública, que es necesario mantener y reforzar. La financiación de los fármacos para ayudar a dejar de fumar en el PAF es efectiva. El éxito es mayor si la persona recibe apoyo educativo y contribuye a la equidad ya que favorece el acceso de personas con renta menor. Se vislumbran nuevos retos de futuro en las tres líneas de actuación del plan.