Active surveillance of acute pesticide poisonings in a potato-growing region of highland Ecuador during 1991-1992 uncovered a rate of 171/100 000, due predominantly to occupational exposures to organophosphate and carbamate pesticides. Occupational exposure among agricultural workers was the most common reason for poisoning (32 male workers and 1 female worker, out of a total of 50 cases). Of these 33 cases, 28 of them reported pesticide application as the work task just prior to poisoning, with over 80% citing the use of World Health Organization Hazard Category I pesticides. The suicide rate of 17.1/100 000 and the overall mortality rate of 20.5/100 000 that we found are among the highest reported anywhere in the world. At the exchange rates prevailing at that time, median costs associated with these poisonings were estimated as follows: public and social security health care direct costs of US$ 9.85/case; private health costs of US$ 8.33/case; and lost-time indirect costs of US$ 8.33/ agricultural worker. Each one of those costs was over five times the daily agricultural wage, which was then about US$ 1.50. Further costing of pesticide poisonings should be carried out in other settings to provide appropriate information for decisions about pesticide use. In addition, integrated pest management should be further evaluated as an appropriate technology to reduce the economic burden of illness from pesticide poisonings in developing countries.
Durante el período 1991-1992, la vigilancia activa de las intoxicaciones agudas por pesticidas en una región montañosa de Ecuador cultivadora de papas reveló una tasa de 171/100 000, debido, sobre todo, a la exposición ocupacional a pesticidas organofosforados y carbamatos. La exposición ocupacional de los trabajadores agrícolas fue la causa más frecuente de intoxicación (32 trabajadores del sexo masculino y 1 del sexo femenino, de un total de 50 casos). De estos 33 casos, 28 informaron que su trabajo inmediatamente antes de la intoxicación consistía en la aplicación de pesticidas, y más de 80% mencionaron el uso de pesticidas incluidos en la Categoría de Riesgo I de la Organización Mundial de la Salud. La tasa de mortalidad global relacionada con los pesticidas, de 20,5/100 000, y la tasa de suicidios de 17,1/100 000 se encuentran entre las más elevadas de todo el mundo. A las tasas de cambio existentes entonces, se estimaron los siguientes costes medianos asociados a estas intoxicaciones: costes directos por atención sanitaria pública y de la seguridad social, US$ 9,85/caso; costes por atención sanitaria privada, US$ 8,33/caso, y costes indirectos por tiempo de trabajo perdido, US$ 8,33/trabajador agrícola. Cada uno de estos costes fue más de cinco veces superior al salario agrícola diario, que entonces era de aproximadamente US$ 1,50. Con el fin de obtener información adecuada para la toma de decisiones acerca del empleo de pesticidas serían necesarias nuevas evaluaciones de los costes de las intoxicaciones por pesticidas en otros contextos. Además, se debería evaluar de nuevo el control integral de las plagas como una tecnología adecuada para reducir la carga económica de las intoxicaciones por pesticidas en los países en desarrollo.