Resumen Calliphora vicina Robineau-Desvoidy es una especie colonizadora primaria en cuerpos en descomposición siendo predominante en las estaciones frías en Provincia de Buenos Aires, Argentina. Se estimó el intervalo post-mortem mínimo (PMImin) usando el crecimiento y longitud larvales como evidencia entomológica precisa del tiempo de muerte transcurrido. Se criaron especímenes a 12, 14, 16 y 18 °C para determinar las tasas de crecimiento larvales y pupales. Se registraron diferencias en los tiempos de desarrollo (43,2 días a 12 °C; 34,3 días a 14 °C; 29,1 días a 16 °C y 24,3 días a 18 °C), observándose tiempos de vida más cortos a mayor temperatura, sin alterarse los rangos de longitud larval (~1,5–18,0 mm). La temperatura también afectó la supervivencia y tamaño de los adultos emergidos; registrándose mayor porcentaje de supervivencia a 14 (29,73%) y 16 °C (38,65%) y mayor mortalidad a temperaturas extremas (19,00% a 12 °C y 12,61% a 18 °C). Los adultos criados a 12 °C fueron los más grandes, las hembras mayores que los machos con una relación inversa entre tamaño y supervivencia. Estos resultados permiten estimar el PMI basado en datos de poblaciones locales en lugar de consultar registros obtenidos en otras regiones.
Abstract Calliphora vicina Robineau-Desvoidy is a primary colonizing species of decomposing bodies, being predominant in the cold seasons in Buenos Aires province, Argentina. The minimum post-mortem interval (PMImin) was estimated using growth and larval length parameters as the accurate entomological evidence of the elapsed time since death. Specimens were reared at 12, 14, 16, and 18 °C, and the larval and pupal growth rates were determined. Differences in the developmental times were registered (43.2 days at 12 °C, 34.3 days at 14 °C, 29.1 days at 16 °C, and 24.3 days at 18 °C), with the lifespan shortened at higher temperatures, without changing the larval length range (~1.5–18.0 mm). Temperature also influenced the survival and size of emerged adults; the highest percentage of survival registered at 14 (29.73%) and 16 °C (38.65%), and more mortality in extreme temperatures (19.00% at 12 °C and 12.61% at 18 °C). Adults reared at 12 °C were the largest of all, females were longer than males, and body size showed an inverse relationship with survival. These results allowed the PMI estimation based on data from local populations instead of consulting papers based on other regions.