OBJECTIVE: To investigate the risk effects of poverty and exposure to collective violence attributed to organized crime on the mental health of children living on the United States-Mexico border. METHODS: A repeated, cross-sectional study measured risk effects by comparing scores of psychosocial and behavioral problems among children and adolescents living on the border in the United States or Mexico in 2007 and 2010. Patients living in poverty who responded once to the Pictorial Child Behavior Checklist (P+CBCL) in Spanish were randomly selected from clinics in El Paso, Texas, United States (poverty alone group), and Ciudad Juarez, Chihuahua, Mexico (poverty plus violence group). Only children of Hispanic origin (Mexican-American or Mexican) living below the poverty level and presenting at the clinic for nonemergency visits with no history of diagnosed mental, neurological, or life-threatening disease or disability were included. RESULTS: Exposure to collective violence and poverty seemed to have an additive effect on children's mental health. Children exposed to both poverty and collective violence had higher problem scores, as measured by the P+CBCL, than those exposed to poverty alone. CONCLUSIONS: It is important to consider that children and adolescents exposed to collective violence and poverty also have fewer chances to receive treatment. Untreated mental health problems predict violence, antisocial behaviors, and delinquency and affect families, communities, and individuals. It is crucial to address the mental health of children on the border to counteract the devastating effects this setting will have in the short term and the near future.
OBJETIVO: Investigar los efectos del riesgo de pobreza y la exposición a la violencia colectiva atribuida al crimen organizado sobre la salud mental de los niños que viven en la frontera entre México y los Estados Unidos. MÉTODOS: En este estudio transversal seriado se midieron los efectos del riesgo mediante la comparación de las puntuaciones de problemas psicosociales y conductuales en los niños y adolescentes que viven en la frontera entre México y los Estados Unidos en el 2007 y el 2010. Se seleccionó aleatoriamente a pacientes que viven en la pobreza que habían respondido en una oportunidad anterior el Cuestionario de Comportamiento Infantil basado en Pictogramas (P+CBCL) en español a partir de consultorios en El Paso, Texas, Estados Unidos (grupo afectado solamente por la pobreza), y Ciudad Juárez, Chihuahua, México (grupo afectado por la pobreza y la violencia). Se incluyeron solamente niños de origen hispano (estadounidenses de origen mexicano o mexicanos) que vivían en la pobreza, que consultaron por motivos que no eran urgencias y que no presentaban antecedentes de enfermedades neurológicas, mentales o potencialmente mortales, ni discapacidad. RESULTADOS: La exposición a la violencia colectiva y la pobreza parecieron tener un efecto aditivo sobre la salud mental de los niños. Los niños expuestos tanto a la pobreza como a la violencia colectiva tuvieron puntuaciones mayores de problemas conductuales y psicosociales según las mediciones del P+CBCL que aquellos expuestos solamente a la pobreza. CONCLUSIONES: Es importante considerar que los niños y los adolescentes expuestos a la violencia colectiva y la pobreza también tienen menos oportunidades de recibir tratamiento. Los problemas de salud mental no tratados son factores predictivos de la violencia, los comportamientos antisociales y la delincuencia y afectan a las familias, a las comunidades y a los individuos. Es crucial abordar el tema de la salud mental de los niños en la región de la frontera a fin de contrarrestar los efectos devastadores que esta situación ocasionará a corto plazo y en el futuro cercano.