Resumen A principios del año 2021 fue modificado el marco teórico-legal bajo el cual se reglamenta la interrupción del embarazo. Entre los meses de agosto 2021 y abril 2022, realizamos una encuesta a 310 trabajadores del Hospital General de Agudos Dr. Teodoro Álvarez (HGATA) y del Centro de Salud y Acción Comunitaria Nº 34 (CeSAC Nº 34), con el objetivo de evaluar su conocimiento al respecto y su capacidad de brindar una respuesta acorde ante la demanda de dicha práctica. Del total de las personas encuestadas, el 72.9% fueron mujeres, el rango etario predominante fue el de 26-35 años y la ocupación mayoritariamente referida fue “residente” (31.3%). Entre los encuestados, definimos dos grupos: conocedores (8.7%, n = 27) y no conocedores (91.3%, n = 283). El 100% de los conocedores brindó una respuesta acorde, mientras que, con relación a los no conocedores, solo el 82.7% pudo hacerlo. La mayoría de los encuestados (85.5%) consideró útil poder recibir capacitación y actualización sobre esta temática en el futuro. Concluimos que la mayoría de los trabajadores del HGATA y del CeSAC Nº 34 desconocen el marco teórico-legal bajo el cual está reglamentada la interrupción del embarazo. Los no conocedores tuvieron dificultades para brindar una respuesta apropiada. Estos resultados muestran el déficit formativo que existe en relación con el marco teórico-legal de esta práctica, por ello, consideramos que esta información sería útil para la identificación tanto de barreras como de facilitadores de acceso a la interrupción del embarazo.
Abstract In early 2021, the theoretical and legal framework for the termination of pregnancy was modified. From August 2021 until April 2022, a survey was conducted among 310 healthcare staff from the General Hospital for Acute Care Dr. Teodoro Álvarez (HGATA, for its acronym in Spanish) and the Health & Community Action Center No. 34 (CeSAC Nº 34, for its acronym in Spanish) to assess their knowledge of the subject and their ability to provide an adequate response to patients inquiring about the procedure. Out of the total number of people surveyed, 72.9% were women, the largest age group was 26-35 years old and the most mentioned occupation was “resident” (31.3%). According to their answers, the respondents were divided into two groups: those who were informed (8.7%, n = 27) and those who were uninformed (91.3%, n = 283). 100% of the informed group were able to provide patients with a correct response while only 82,7% of the uninformed group were able to do so. The majority of the respondents (85.5%) deemed it helpful to receive training and updates on voluntary termination of pregnancy in the near future. Most of the healthcare staff from the HGATA and from the CeSAC No. 34 are unaware of the theoretical-legal framework under which the interruption of pregnancy is regulated. The uninformed presented difficulties in providing an appropriate response. These results show the formative deficit that exists in relation to the theoretical-legal framework. This information could be useful for the identification of barriers and facilitators of access to an interruption.