Objective. Previous research has shown that controlling blood glucose improves short-term and long-term outcomes among patients who have either type 1 or type 2 diabetes. The objective of this study was to investigate, in a developing country, the effectiveness of an intervention that included patient education, self-monitoring of blood glucose, and determination of the level of glycosylated hemoglobin (HbA1c). Methods. The patients were grouped into three categories, taking into account such clinical manifestations as the duration of their diabetes, its treatment, and their hospitalization history. After the inclusion and exclusion criteria were applied, the persons were randomly assigned to two groups. One group (210 patients) received the educational intervention, and the control group (206 patients) received customary care. The intervention group received educational information needed for self-monitoring of blood glucose and for the self-evaluation of positive and negative behaviors related to metabolic control of the disease. Results. The two groups were similar with respect to age (mean of 52.3 and 50.5 years) and to the proportion of patients with type 1 diabetes (13.8% and 16.0%). There were no initial differences in the average concentration of HbA1c in the two groups (8.9% ± 0.1% and 8.9% ± 1.4%). A total of 50 persons dropped out of the study, 14.8% of those in the intervention group and 9.2% of those in the control group. In the intervention group, compliance with dietary recommendations increased by 43.5%, from 57.5% at the beginning of the study to 82.5% at the end (P < 0.001); in the control group there was also a change but it was not significant. Although patients with a high initial HbA1c concentration were underrepresented in this study, the average HbA1c concentration declined significantly in the intervention group (-0.4% ± 1.1%, P = 0.001) but not in the control group (-0.1% ± 0.1%). Conclusions. In one developing country, educating patients about diabetes helped improve metabolic control, a fact that can be attributed mainly to the intervention's positive impact on those persons' diet.
Objetivos. Investigaciones anteriores han demostrado que el control de la glucemia mejora los desenlaces a corto y largo plazo de los pacientes con diabetes de tipo 1 y 2. El objetivo de este estudio consistió en investigar en un país en desarrollo la eficacia de una intervención que incluyó la educación del paciente, la automonitorización de la glucemia y la determinación de la hemoglobina glucosilada (HbA1c). Métodos. Los pacientes fueron agrupados en tres categorías, teniendo en cuenta características clínicas tales como la duración de la diabetes, su tratamiento y los antecedentes de hospitalización. Los que cumplieron los criterios de inclusión y exclusión fueron asignados aleatoriamente a un grupo que recibió la intervención educativa (210 pacientes) o a un grupo de control que recibió la asistencia habitual (206 pacientes). El grupo de intervención recibió la información educativa necesaria para la automonitorización de la glucemia y para la autoevaluación de las conductas positivas y negativas relacionadas con el control metabólico de la enfermedad. Resultados. Los dos grupos eran similares con respecto a la edad (media de 52,3 y 50,5 años) y a la proporción de pacientes con diabetes de tipo 1 (13,8% y 16,0%). Inicialmente no había diferencias entre las concentraciones medias de HbA1c de los dos grupos (8,9 ± 0,1 y 8,9 ± 1,4%). Cincuenta pacientes (un 14,8% del grupo de intervención y un 9,2% del grupo de control) abandonaron el estudio de forma prematura. En el grupo de intervención, el cumplimiento de las recomendaciones dietéticas aumentó del 57,5% al principio del estudio al 82,5% al final del mismo, lo cual representa un cambio porcentual del 43,5% (P < 0,001); en el grupo de control el cambio registrado no fue significativo. Aunque los pacientes con concentraciones iniciales elevadas de HbA1c estaban subrepresentados en este estudio, la concentración media de HbA1c disminuyó significativamente en el grupo de intervención (-0,4 ± 1,1%; P = 0,001), pero no en el grupo de control (-0,1 ± 0,1%). Conclusiones. En un país en desarrollo, la educación diabetológica del paciente consiguió mejorar el control metabólico, hecho atribuible principalmente a su impacto positivo sobre la dieta.