Abstract: Introduction: The presence of organized crime may encourage an increase in the supply of illicit substances, the incorporation of young people into crime, the promotion of substance-oriented lifestyles, and the use of violent tactics to control territories that generate insecurity and loss of social capital are generated. Objective: The purpose of this study is to determine the barriers related to the presence of organized crime for the prevention and treatment of addictions from the perspective of health staff. Method: Based on a grounded theory study, eight semi-structured focused interviews were conducted with the staff of a primary addiction care center. In the interviews, the characteristics of the center, type of services, user profiles, the most successful treatments and barriers to care were explored, emphasizing those related to the presence of organized crime in the community. The data obtained were subjected to a thematic analysis with the help of MAXQDA software version 12. Results: Thematic analysis shows that criminal organizations determine which substances are used, encourage distribution within educational contexts, establish control processes in communities, limit preventive actions and treatments, and promote lifestyles associated with consumption, which especially affect vulnerable young people at the familial, social, and economic level. Discussion and conclusion: Membership of organized crime is also linked to substance use, so those affected seek treatment in spaces where there are insufficient safety conditions and health providers to create personal strategies for their protection. The article concludes that addiction prevention implies the recovery of communities and educational spaces by state institutions, while care requires better safety conditions for users and health staff.
Resumen: Introducción: La presencia del crimen organizado favorece el aumento de la oferta de sustancias ilícitas, la incorporación de jóvenes en la delincuencia, la promoción de estilos de vida orientados al consumo de sustancias y el uso de tácticas violentas para controlar territorios que generan inseguridad y pérdida de capital social. Objetivo: Conocer las barreras relacionadas con la presencia del crimen organizado para la prevención y el tratamiento de las adicciones desde la perspectiva del personal de salud. Método: A partir de un estudio de teoría fundamentada, se realizaron ocho entrevistas semi-estructuradas focalizadas al personal de un centro de atención primaria en adicciones. En las entrevistas se exploraron las características del centro, el tipo de servicios, el perfil de los usuarios, los tratamientos más exitosos y las barreras para la atención, haciendo énfasis en las vinculadas con la presencia del crimen organizado en la comunidad. Los datos obtenidos se sometieron a un análisis temático con ayuda del software MAXQDA versión 12. Resultados: El análisis temático muestra que las organizaciones delictivas determinan las sustancias que se consumen, favorecen la distribución dentro de contextos educativos, establecen procesos de control en las comunidades, limitan las acciones preventivas y los tratamientos, y promueven estilos de vida asociados al consumo, todo lo cual afecta especialmente a jóvenes vulnerables en el ámbito familiar, social y económico. Discusión y conclusión: En comunidades donde hay crimen organizado, las instituciones que brindan tratamiento no cuentan con condiciones de seguridad, por lo que el personal de salud requiere generar estrategias personales para su protección. La prevención de las adicciones implica la recuperación de las comunidades y espacios educativos por parte de las instituciones del estado, mientras que la atención requiere mejores condiciones de seguridad para los usuarios y el personal de salud.