Abstract A bistable image admits two possible interpretations, so that the observer can recognize the two percepts, but never at the same time. The alternations between percepts are called “perceptual reversals”. When the observer's position is different from the upright position, the ability to make perceptual alternations may be impaired. Besides, the recognition of the percepts of a bistable image can be a complex reaction time visual task, if it involves recognizing two different conceptual units, added to the fact of having to make a subsequent report. A visual task was performed by 88 people in order to establish whether the perception of Boring’s bistable image My girlfriend or my mother-in-law is associated with areas that condition its interpretation. It was assumed that decoding the image and reporting the perceived percept implied a complex reaction time. The task itself was done in front of a fixed 120 Hz eye-tracker, in two opposite body positions. Analyses were made reviewing the association of the percepts with bottom-up modulation areas of the image, and considering ocular fixations made 200 and 250 milliseconds before the time of the report. The records of these fixations were obtained so as to establish which of the two reaction times (200 ms or 250 ms) was involved in the bottom-up modulation process from the moment of ocular fixation to the reports given by the participants. It was concluded that perceptual reversals decrease significantly when head idiotropic axis points in the gravity vector direction, in comparison to the upright position. Likewise, associations between visual percepts and bottom-up modulating areas of the image were found when analyses were done by considering ocular fixations made 250 ms before the moment of the report. Interpreting Boring’s bistable image implies a complex visual task in accordance with the results obtained.
Resumen Una imagen biestable admite dos interpretaciones, de modo que el observador reconoce cada percepto, pero nunca los dos al mismo tiempo. Cada alternancia entre uno y otro percepto se conoce con el nombre de “reversibilidad perceptual”. Este tipo de percepción, denominada también “biestable”, puede implicar dos tipos de modulación, una mediada por las características físicas del estímulo visual y por las áreas de fijación ocular, y otra por información contextual o por conocimiento almacenado en memoria. En ese sentido, las alternancias perceptuales que se manifiestan durante la observación de una imagen biestable pueden estar condicionadas por la manera en que el observador recorre con su mirada el estímulo biestable, de manera tal que es manifiesta una asociación entre específicas áreas de la imagen y el percepto que se reconoce. En efecto, para la imagen biestable de Boring Mi novia o mi suegra, se han establecido áreas de fijación ocular que favorecen los dos posibles perceptos (una mujer joven y una mujer de edad). Algunas de estas zonas elicitan más la interpretación de uno de los perceptos, otras de los dos indistintamente, como se reconoce en estudios precedentes. Por otra parte, se ha encontrado evidencia de que cuando la posición corporal del observador es distinta a la posición erguida (el tronco y la cabeza alineados con la vertical), puede dificultarse la capacidad para hacer las alternancias perceptuales. La rotación del eje idiotrópico de la cabeza con respecto al vector que apunta verticalmente hacia el cénit tiene repercusiones en los procesos perceptuales visuales y también en la manifestación de las reversibilidades perceptuales inherentes a la observación de imágenes biestables. El reconocimiento de los perceptos de un estímulo visual biestable puede suponer una tarea visual de tiempo de reacción complejo (superior a 230 milisegundos), dado que esta implica reconocer dos unidades conceptuales diferentes. A esto se suma el hecho de tener que hacer un reporte posterior que implique eferencias motoras. A los efectos de establecer si la percepción de la imagen biestable Mi novia o mi suegra está asociada a las áreas del estímulo que condicionan su interpretación cuando se asume que su decodificación más su reporte implican un tiempo de reacción complejo, se hicieron análisis de tareas visuales realizadas por 88 personas frente a un eye-tracker fijo de 120 Hz en dos posiciones corporales opuestas (una, con el tronco erguido y el eje idiotrópico de la cabeza apuntando hacia el cénit, y otra con el vector idiotrópico de la cabeza apuntando hacia el suelo en paralelo al eje gravitacional). Se revisó la asociación de los perceptos con las áreas de modulación de la imagen y considerando las fijaciones oculares realizadas 200 y 250 milisegundos antes del momento del reporte, el cual fue realizado por cada participante mediante el uso de los botones de un dispositivo conectado al registrador de datos. Los registros de fijaciones oculares, tomados en dos momentos previos al momento del reporte de los perceptos identificados, fueron considerados para establecer cuál de los dos tiempos de reacción (200 ms o 250 ms) está implicado en el proceso de modulación bottom-up desde el momento de la fijación ocular hasta el reporte dado por los participantes. Se concluyó que las reversibilidades perceptuales disminuyen significativamente cuando el eje idiotrópico de la cabeza apunta en el sentido del vector gravitacional en comparación con la posición erguida. Se encontraron asociaciones entre los perceptos y las áreas de modulación cuando en el análisis se consideran las fijaciones oculares registradas, 250 milisegundos antes de los reportes. La interpretación de la imagen analizada supone una tarea visual compleja de conformidad con los resultados, pues el análisis de asociación entre perceptos reportados y áreas moduladoras que arroja significancia es el que se hace revisando las fijaciones oculares hechas 250 ms antes del registro del reporte de cada percepto.
