Objectives: To estimate the proportion of people requiring palliative and support care at home in primary care and to describe their characteristics. Methods: A descriptive study was carried out by five Spanish sentinel networks between October 2007 and March 2008 in 282,216 people attended by 218 general practitioners and nurses. Patients receiving comprehensive, active and continued care at home were included if the aim was not to prolong life but to achieve the best quality of life for the patient, the family and the carers. A standard form was used to collect data on age, sex, type of patient, underlying diseases and other variables related to the process. Crude and age-adjusted rates were estimated. Results: Of the 400 men and 792 women registered, 12% were strictly terminal. The mean age was 82.4years and was higher in patients with functional disability (82.9years) than in terminally-ill patients (78.9 years) (p<0.01). The estimated prevalence was 422.3 per 100,000 inhabitants aged 14 years or more (95% CI: 398.7-447.0) and was much higher in women than in men (553.9 versus 287.3, p<0.01). The estimate for the entire Spanish population was 309.0 per 100,000 inhabitants (95% CI: 286.0-332.0). Conclusions: The prevalence of palliative and support care in Spain is around three cases per 1,000 inhabitants and is higher in elderly populations. More than 85% of patients needing palliative or support care have a life expectancy of over 6 months and thus represent the majority of persons using this type of medical and social support. The most susceptible groups are women and the oldest-old.
Objetivos: Estimar la proporción de personas que precisan cuidados paliativos y de soporte de atención primaria en su domicilio y describir sus características. Métodos: Estudio descriptivo de las Redes Centinelas Sanitarias de cinco comunidades autónomas, entre octubre de 2007 y marzo de 2008, en 282.216 personas atendidas por 218 profesionales de atención primaria. Se incluyeron pacientes que recibían en el domicilio un cuidado integral, activo y continuado, en quienes la expectativa médica no era prolongar la supervivencia sino conseguir la más alta calidad de vida para el paciente, la familia y el entorno de cuidadores. En un cuestionario estándar se recogieron la edad, el sexo, el tipo de paciente, la enfermedad subyacente y otras variables relacionadas con el proceso. Se estimaron las prevalencia crudas y ajustadas por edad. Resultados: De los 400 hombres y las 792 mujeres que cumplían los criterios de inclusión, el 12,5% eran terminales en sentido estricto. La media de edad fue de 82,4 años, mayor en los pacientes con incapacidad funcional (82,9 años) que los terminales (78,9 años) (p<0,05). La prevalencia se estimó en 422,3 casos por 100.000 habitantes mayores de 14 años (intervalo de confianza del 95% [IC95%]: 398,7-447,0). Las mujeres presentaron una prevalencia muy superior a la de los hombres: 553,9 frente a 287,3 (p<0,01). La estimación para el conjunto de la población española fue de 309,0 por 100.000 habitantes (IC95%: 286,0-332,0). Conclusiones: La prevalencia de cuidados paliativos y de soporte en España se situó en torno a tres casos por cada 1000 habitantes, mayor en las poblaciones más envejecidas. Más del 85% de los pacientes que necesitaron estos cuidados tenían una esperanza de vida de más de 6 meses, por lo que representan la mayoría de los usuarios de este tipo de atención médica y social. Las mujeres y las personas de edad más avanzada son los más susceptibles.